Perro de Liberación

¿Porqué tengo un perro? No lo sé. Lo único que sé es que me siento menos sola. Dès de tener el perrito tengo la sensación que el me guía de mi aislamiento a la “propria vida”. Si el toma el olor de una flor o intenta atrapar una mariposa me parece como si yo descubriera el mundo “por la segunda vez”. Yo tenía un aborto. Y aunque ningun ser vivo puede estar sustituido a un otro ser me siento afortunada de estar con él. Eso me da una nueva perspectiva del mundo: La “vieja” Renata que temía la multitud y veyendo allí familias “felices” estaba deprimida se había cambida en una “madre perro”. Así tengo un nuevo enfoque: Presto attención que el perrito no come algo malo, que deja de temar las bicicletas, las maquínas y la gente corriendo. Como un perrito no tiene ningun sentimiento por “el tiempo” eso también me hace vivir más en el momento. El presente es el único tiempo donde una persona puede encontrar “curación”. Todavía estoy triste de todo que se ha malpasado en el pasado. También temo que algo “peor” se pasara en el futuro. Pero paso menos tiempos el el labirinto de estos pensamientos. Y también sé que “un perro” no sea la solución general para gente que sufre del trauma y la depresión. Lo único que sé es que para mi me ayuda de no tirar toda mi aggressión supprimida contra mi misma. El perro me hace levantarme a las seis de la mañana. Vamos al río y mientras estoy todavía echando de menos de mi cama segura esto cambia con nuestro bañito en el río. Ahora mi día puede comenzar y ya sé que seis horas más tarde estaré otra vez “en el mundo” con mi perro. Todavía hay un poco de tiempo para contemplar mi vida en silencio. Pero este tiempo es mas saboroso que las largas horas en cama donde me escondé de “la realidad del mundo”. Me siento con más energía y es como si el amor loyal del animal curara mis blesuras del pasado. La relación con mi perro y “estando en el mundo” otra vez me dan una satisfacción que me impide de compararme con otros. Esos son mis pensamientos que quería compartir con vosotros, queridos lectores.

Renate Weber

Written by Renate Weber